viernes, 23 de enero de 2009

líneas imaginarias

Me despedí de ella
y unos pasos después noté
que tenía el corazón azul
que se me salía por la camisa
coagulado y azul.

Miré a la gente que pasaba
indiferente indiscutible.

Me miré el pecho de nuevo
y un bulto se me salía cada vez con más violencia
sentí una tragedia aproximarse.

Venas azules y moradas
se me extendían por el cuerpo
como enredaderas.

Volví a mirar la gente del bulevar
sólo pude caminar
respirar
y por nada del mundo
mirar atrás.

martes, 13 de enero de 2009

Retorno

No es que no repare
en el tedioso viaje en bus
o en la camisa empapada adherida a la espalda

pero es que siempre
siempre me resulta en una incógnita
estar un momento
frente al televisor
o en una esquina aguardando un semáforo,

y al otro momento aquí
de frente al mar

y entonces no quiero
ni puedo pensar
cómo
ni por qué volví a llegar
aquí
a diluirme con la dinámica
de la resaca del mar.