viernes, 23 de enero de 2009

líneas imaginarias

Me despedí de ella
y unos pasos después noté
que tenía el corazón azul
que se me salía por la camisa
coagulado y azul.

Miré a la gente que pasaba
indiferente indiscutible.

Me miré el pecho de nuevo
y un bulto se me salía cada vez con más violencia
sentí una tragedia aproximarse.

Venas azules y moradas
se me extendían por el cuerpo
como enredaderas.

Volví a mirar la gente del bulevar
sólo pude caminar
respirar
y por nada del mundo
mirar atrás.

3 comentarios:

ViviSol dijo...

¿Y cómo pintar sobre el azul...?

mont dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
mont dijo...

pero si el flaco viene y receta como buen compay al mundo vivir de azul... encima un azul sin domingos... y que hay mas siniestro que un domingo tildado, decime?

na...

entonces, porque no embriagarse de azul y vivir andando por fin librados del domingo?