El sol de semana santa
cae sobre la tierra
aplastándolo todo,
empujando contra el asfalto
cualquier rastro de viento
y agua,
para hacerlo brotar como vapor
y subir
el calor.
Pareciera un castigo
el calor
pero es una señal.
No es casualidad el silencio,
no es casualidad que todos se vayan
en busca del mar
en busca de olvidar,
la dinámica de semana santa
debe ser una señal.
El que tenga oídos
que oiga.
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5 comentarios:
usté si escribe bien...canta? todo es tan musical y fluido que perfectamente podría hacerlo canción...aunque así leído con la musiquita interna que ya tiene la poesía suya ya está bien...sigua adelante compay y demás hablada de autoayuda!...ya algún día cuando camine por la calle tal vez lo salude si no estoy perdía intentando recordar una canción...y le puse un comentario en este...aunque todo lo que escribió me gusta.
los santos
quedamos
como estatuas de sal
quedamos
disueltos
en la humedad de abril.
ponga más varas.
huevón.
si tienes voz, tienes palabras déjalas caer
cayéndose suena tu vida aunque no lo creas
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